La carrera de Maxi Arce es así, intensa. De hecho, en un año duro y sorprendente como el que está viviendo en este 2025, optó por suspender su semana de descanso que tenía en el circuito de Premier Pádel y responder positivamente al llamado a integrar por primera vez el equipo de la selección nacional, volar a Santiago de Chile, jugar todos los encuentros de los Panamericanos y salir campeón con Argentina.
El zurdo de Salta está jugando en la actualidad junto a Pablo Lijó. Este año no tenía ranking en la Federación Internacional de Pádel (FIP), pero con ese espíritu ganador y esa voluntad de hierro, más el concepto de dejarlo todo en la cancha, pelear cada pelota y entrenar para ser el mejor, logró en pocos meses sorprender al circuito de Premier Pádel. Recibió la bienvenida de manera elogiosa por parte de los mejores jugadores del mundo, luego de deslumbrar junto a Franco Stupazuk en el Málaga P1, donde llegaron a los cuartos de final.
Comenzó a sumar puntos de manera increíble. Otros cuartos de final en el P1 de Madrid, que se jugó a poco más de un mes en su debut en la liga. Superó qualys y siempre fue para adelante. El concepto: trabajar y trabajar. Así, como su carrera intensa, está hoy ubicado 84 del ranking mundial y 63 en la carrera del año. Aspira a terminar 40, para dejar de jugar clasificaciones a cuadros principales y planificar lo que será el 2026, donde seguramente se afianzará entre los mejores del circuito mundial.

En los Panamericanos de Santiago de Chile se volvió a encontrar con su compañero de A1 Pádel, el circuito internacional que jugaba hasta principios de año cuando se canceló el proyecto. Allí era el número 1 de esta competencia junto a otro argentino, Franco Dal Bianco. Pero en Chile hizo dupla, a pedido del cuerpo técnico, con Maxi Sánchez Blasco. Fue esta pareja la que nos regaló el partido más lindo de este campeonato continental, cuando venció por 7/6 7/6 a los paraguayos Martín Abud y Mariano González. “Soy un jugador muy versátil que se adapta rápido a los compañeros”, nos decía; pero la verdad es que da lo mejor de sí y hace que sus compañeros también lo hagan.
Este 2025 quedará como un año difícil y extraño para Maxi Arce Simo, pero con un final abierto y un tránsito deslumbrante. Momentos de incertidumbre, sin saber qué torneos jugar ni cómo prepararse para ello. Se cayó A1 Pádel donde estaba en la cima y no sabía cómo seguiría su carrera. Lo convocaron con Dal Bianco para integrar un equipo de la Pro Pádel League -Olas de Cancún-, y lo comenzaron a conocer en el mundo. Llegó el llamado de Stupa para jugar juntos en Premier, tras una lesión de Lebrón. Con espíritu de campeón tomó esa oportunidad, lo dio todo, sorprendió al mundo y estuvo a un pasito de dar el batacazo.
Maxi Arce tiene 27 años, estudia administración de empresas y quiere volver a Salta cuando termine su carrera deportiva, con la idea de mantenerse en el mundo del deporte, seguramente del pádel, pero priorizando todo lo que tiene que ver con el entrenamiento físico, que lo apasiona. En su provincia natal fue declarado como Embajador Deportivo.

Sin dudas, es uno de los jugadores argentinos del año, si no el más destacado, por sus logros y su ritmo de juego y adaptación. Por eso, entrevistarlo para nuestro canal de YouTube era uno de los objetivos periodísticos del viaje que hicimos para cubrir los Panamericanos en Chile. Y con la humildad y la amabilidad que lo caracteriza, luego de ese 7/6 7/6 contra el equipo paraguayo, nos concedió una hermosa entrevista.
Sin saberlo, tuvimos algunos problemas técnicos que nos jugarían una mala pasada y no hicieron posible su transmisión. Pero, a lo Arce, frente a la adversidad, buscamos la solución, nos pusimos a escribir para compartir parte de lo conversado en dicha nota, y nos propusimos como meta, a fin de año, vía Zoom, hacerle una nueva entrevista para nuestro canal, ya realizando el balance de su año completo y preguntándole cómo se proyecta para el 2026.
A estar atentos y a tener paciencia, que, si uno trabaja, ya lo viene demostrando Maxi, los resultados llegan.









